Conoce nuestra historia
Don Raúl Páez emprendió su aventura por el amor al café en 1956 y durante los siguientes 59 años de su vida se dedicó a perfeccionar el arte de seleccionar y tostar los mejores granos arábigos en México, pues para él solo existía un café; el buen café.
Hoy buscamos transmitir esa misma pasión seleccionando los más finos granos de las más reconocidas fincas cafetaleras a nivel nacional.